El 25 de marzo, Anitta se convirtió en la primera brasileña en alcanzar el número uno en un ranking musical mundial. Su canción “Envolver” se convirtió en la más popular de la lista de reproducción global del Top 50 de Spotify, con 6.4 millones de reproducciones, de las cuales 4.1 millones vinieron de Brasil. 

Pero su éxito en las listas de Spotify no se debe únicamente al pegadizo estribillo de la canción. Rest of World pudo confirmar con fanáticos de Anitta y especialistas de la industria de la música que parte del éxito de “Envolver” puede tener que ver con que los fans manipularon los algoritmos de la plataforma, acercándose a una infracción de los términos y condiciones de Spotify. Al menos en parte, la estrategia fue fomentada por el propio equipo de Anitta, que instó a los fans a inflar las reproducciones en la plataforma.

El 14 de marzo, la cuenta oficial de fans de la artista en Twitter, QG da Anitta, retuiteó la publicación de otra cuenta de fans que alentaba a la gente a aumentar la popularidad de “Envolver” creando listas de reproducción con la canción y recordándoles que “utilizaran diferentes cuentas en Spotify y no olvidaran cambiar de cuenta después de 20 reproducciones”. Al día siguiente, esa misma cuenta oficial puso en marcha un sorteo de suscripciones a Spotify Premium para los usuarios que enviaran capturas de pantalla reproduciendo “Envolver” en Spotify.

Rest of World contó más de 100 listas de reproducción en Spotify con nombres como “Envolver #1”, “Stream Envolver”, “Envolver stream party” y “Envolver 20x”. En sus descripciones, la mayoría de esas listas indicaba expresamente que su objetivo era aumentar el número de reproducciones de la canción. “Reprodúcela solo una vez al día, no la dejes en reproducción aleatoria y sube el volumen”, dice una de las descripciones. 

Spotify se negó a comentar sobre potenciales violaciones de los términos y condiciones, pero confirmó que Anitta era la primera artista brasileña en encabezar sus listas.

Adriano Ferreira da Silva Filho, un fan de 19 años de Ilhabela, una ciudad costera del estado de São Paulo, le contó a Rest of World que quería impulsar la popularidad de “Envolver” como agradecimiento a la artista por haber marcado su vida. Así que da Silva Filho creó varias listas de reproducción distintas a fin de hacer sonar la canción más de 2,000 veces al día, utilizando su computadora portátil y dos celulares para poder reproducirla simultáneamente desde diferentes nombres de usuario. 

“Si pones la canción en repetición, Spotify no la cuenta como reproducción”, explicó da Silva Filho. “Piensan que es un bot. Así que tienes que crear una lista de reproducción con diferentes canciones y alternarlas con la que quieres potenciar”.

“Si pones la canción en repetición, Spotify no la cuenta como reproducción”.

Los fans de Anitta no son los primeros que intentan hackear el algoritmo de Spotify en beneficio de su artista preferid, ya que llegar a la cima de los rankings de las plataformas de streaming ofrecen a los artistas algo más que el derecho a presumir. Buenos resultados en las listas de reproducción a menudo inflan los números de quienes van a conciertos, donde los artistas recaudan más dinero que en las plataformas. Los músicos que antes soñaban con estar en la radio ahora quieren aparecer en las grandes listas de reproducción, afirmó la directora de marketing Nathy Faria, coordinadora de Music Rio Academy, por más que sea de público conocimiento que los artistas reciben poco o nada de Spotify, a menos que sus canciones alcancen cientos de millones de reproducciones. 

El pasado mes de julio, una importante operación del Centro de Investigación de Delitos Cibernéticos de Brasil cerró 84 sitios web que alquilaban bots para aumentar artificialmente las cifras de streaming de artistas brasileños. La plataforma advierte que esos servicios que venden reproducciones artificiales se exponen a que sus cuentas sean prohibidas, ya que sus actividades constituyen una violación de los términos y condiciones.

La venta de las llamadas reproducciones falsas en Spotify es “un desastre”, en palabras de Farias. “[Esas] plataformas y artistas venden un engaño”, agregando que la falta de transparencia en plataformas de streaming como YouTube y Spotify les dificulta a los usuarios distinguir lo verdadero de lo falso. 

La campaña de “Envolver” cae en una zona gris, dado que parecería que muchas reproducciones fueron generadas por un ejército de fans muy comprometidos y no por bots, que Spotify se ha vuelto muy experto en detectar y expulsar de su plataforma. “Desde la perspectiva del marketing digital, no tiene nada de malo que lo hagan los fans. Si una artista tiene gente dispuesta a hacerlo, eso solo demuestra su fuerza”, dijo Faria. 

Rodolfo Lacerda, de Música em Rede, una empresa con sede en São Paulo dedicada a gestionar carreras de artistas, dijo que, cuando vio las listas de reproducción infladas, pensó: “¿Esto podría meterla [a Anitta] en problemas? Pero hacer listas de reproducción para beneficiar a tu artista favorito no es trampa … Quizá si [la canción] no hubiera sido para ellos, se habría quedado en la décima o novena posición. Pero por supuesto, no es algo que un artista deba fomentar”. 

Si bien el equipo de Anitta se abstuvo de hacer comentarios, publicó un comunicado en Instagram el 25 de marzo que agradecía a todo el mundo y decía: “En este momento, estoy en shock”. Al final de ese fin de semana, “Envolver” bajó al segundo puesto del ranking, y una semana después se estacionó en la quinta posición. Pero para seguidores como da Silva Filho, esto aún no termina. Dice que los fans están haciendo planes para aumentar sus números cuando salga el nuevo álbum de Anitta a mediados de abril.